sábado, 14 de agosto de 2010

Escenas de una fabula incompleta


Licántropos


El Lobo – Hombre; Boris Vian
“Llegados a este punto, preciso es reconocer que determinadas escenas entrevistas en el bosque se reprodujeron en la imaginación del lobo sin provocar en él las mismas reacciones que antes.”

1.
Los rumores sostenían que el rey Licaón, ordenaba asesinar a cualquier forastero que se
acercara a Arcadia para brindar un sacrificio en honor a Zeus.
Cuando esta historia llegó a sus oídos, el rey del Olimpo decidido filtrarse disfrazado de
vagabundo para comprobar por sí mismo qué había de cierto.
Se sabe que Licaón descubrió a Zeus detrás de los harapos que vestía mucho antes que
éste revelase su identidad. Esta anticipación lo tentó a jugarle una broma y mandó a servirle
un suntuoso banquete de carne humana.
El ingenuo de Licaón se consideró más astuto que Zeus y por supuesto no lo fue.
Zeus descubrió sus planes y con ira condenó a Licaón y a toda su descendencia a
convertirse en lobos.

2.
Lejos de la ferocidad del Werwolf de Cranach El viejo, los licántropos de Julia Dron
desprenden cierta melancolía. Parecen ser los descendientes de Licaón padeciendo
eternamente la maldición que Zeus lanzó contra su ancestro.
Juntos en cada escena parecen sostener sus pequeños combates cotidianos de
supervivencia.
Nada tienen del funcionamiento de los antropomorfos de Marcel Dzama, tan trágicos, con su
violencia organizada.
En las pinturas de Julia Dron el agua se exalta, la maleza crece anárquica y todos los objetos
cobran otra dimensión. El lomo de un animal atraviesa la escena y no podemos distinguir ni
su tamaño, ni su especie. Brotan flores y arden las llamas.
La naturaleza resulta incontrolable para nosotros.
Mientras tanto algunos de los hombres lobo sostienen una soga y el bosque se les desborda.

3.
El cronista medieval Gervase de Tilbury asoció la transformación con el calendario lunar y
no es casual que la luna permanezca llena recortando el cielo espeso en la mayoría de sus
pinturas.
Tampoco es casual que me resulten tan inquietantes las noches a medida que aumenta el
cuarto creciente. Desde que ví las imágenes de Julia Dron espero los aullidos lejanos.

Leonel Pinola

domingo, 7 de marzo de 2010

Desmalezar

Habitar, la luz nos habita ...

Habitar


Como habitamos los espacios, como nos apropiamos de los lugares?. Habitar es movilizar la inercias de los objetos cotidianos, mesas , sillas, plantas, mis hilos,etc.
La propia casa como espacio escenográfico como prueba de ensayo y error, para llegar a la confortabilidad espacial, el desmalezar, especie de ritual en la ...entrada a un nuevo lugar que debe ser apropiado. Mi hogar y las cosas,mis objetos seleccionados que allí se ubicaran.

A partir de este juego surgieron en mi mudanza en el 2009 varias ilustraciones donde los objetos cotidianos se encuentran distribuidos aleatoriamente, ludicamente provocando extrañeza y misterio.

Habitar y desmalezar